Justo unos días antes de cumplir 28 años, Milagro Medina vivió uno de los momentos más emocionantes de su vida. Luego de superar adversidades por doquier en los últimos años, volvió a competir en un Nacional de marcha, la disciplina que practica desde hace tiempo y a lo hizo a lo grande: con un tiempo de 2 horas 9 minutos y 39 segundos, obtuvo el tercer puesto en la categoría mayores en la prueba de 20 kilómetros.
“Fue un momento muy feliz para mí; no sólo por el podio, sino por haber estado nuevamente en un evento nacional”, expresó en diálogo con LA GACETA. Claro, en 2018 había sido la última vez que había podido decir presente en un torneo; y en aquella ocasión, también había logrado hacer podio (obtuvo un segundo lugar).
“Distintas lesiones, operaciones y situaciones personales fueron haciendo que mi carrera deportiva se postergase. Igualmente, siempre supe que en algún momento se me iba a dar e iba a volver a planos nacionales. Y fue este año. Una vez que crucé la meta, sentí satisfacción y orgullo por haber conseguido lo que me había propuesto y por lo que había trabajado duramente”, reflexionó.
¿Qué pasó, exactamente, en estos últimos años? ¿Cuáles fueron las cosas que le impidieron a Milagro competir? Fueron varios los obstáculos que debió sortear, según ella mismo relató.
“En 2018 me lesioné la rodilla, tuve osteocondritis. Realicé tratamientos pero no funcionaban para volver al alto rendimiento”, recordó. Dos años después, en 2020 y ante el consejo de su médico, la joven se realizó una cirugía con injerto de cartílago. “Hasta ahí iba todo bien; estaba con fisioterapia…”, sostuvo. Sin embargo, nuevamente, aparecieron las piedras en el camino.
“Hubo una seguidilla de enfermedades familiares complicadas y también una cirugía de urgencia de apéndice. Todas esas situaciones fueron complicando y postergando mi entusiasmo por volver a competir”, afirmó Medina. Claro, darse por vencida nunca fue una opción.
“Luego de que todo se calmó, con la ayuda de mi médico, de mi kinesiólogo y mi papá y entrenador (Miguel), nos pusimos en condiciones nuevamente para volver a entrenar”, continuó Milagro. “Recién a mediados de 2022, y en 2023, pude volver a trabajar más fluido, pero siempre corriendo en carreras de calle. Eso me ayudó a conseguir buen estado físico y sobre todo resistencia. La marcha recién empecé en febrero de este año nuevamente, tuve muy poco tiempo de entrenamiento específico. Mi cuerpo, gracias a Dios, respondió a lo que ya conocía”, apuntó.
Justamente, toda su experiencia en la disciplina fue clave además del fuerte trabajo físico para obtener el gran resultado que logró en Mar del Plata, en donde fue el Nacional. Pese a que la marcha no es una de las ramas más elegidas del atletismo, habitualmente, Medina lleva varios años practicándola.
“Mi papá, que es profesor de educación física, me enseñó la marcha. No conocía la disciplina, pero él me propuso empezar a participar en carreras y comencé a los 16 años”, recordó sobre sus comienzos. En medio de esa primera etapa, aún con poco rodaje, surgió la posibilidad de competir en las etapas regionales de los Juegos Evita. Allí ganó a nivel provincial y eso le permitió viajar a Mar del Plata para la final nacional.
“En Mar del Plata eran muchas chicas de distintas provincias haciendo lo mismo que yo. Me encantó y decidí que quería seguir haciendo eso”, contó Milagro sobre el ‘empujoncito’ final para dedicarse a la marcha. Allí, comenzó la prolífica carrera que le permitió obtener dos medallas de plata en nacionales (en 10 kilómetros en 2015 a nivel juvenil, y otra en 20 kilómetros en 2018 en mayores), y también llegar a representar al país en la Copa Panamericana de Lima, en 2017, con 21 años.
“Fue una experiencia hermosa compartir días con atletas de distintos países. También conocí a referentes mundiales y pude compartir y competir con ellos. Lo más lindo de ese momento fue el buen grupo que se formó en el seleccionado argentino. Fue una de las vivencias más lindas que me dio este deporte”, rememoró sobre esa experiencia internacional.
Claro; aun con el gran resultado obtenido recientemente, Milagro trata de tomar su regreso con calma. “En principio, la idea era probar para ver cómo respondía mi rodilla a la marcha. Eso resultó bien; así que buscaré alguna otra competencia en los próximos meses, pero en Argentina hay muy pocas”, detalla.
Sin embargo, Milagro mantiene la ilusión de mantenerse en los primeros planos a nivel nacional. “La idea es seguir compitiendo a nivel nacional y representar a la provincia. Este nacional fue el envión que necesitaba para volver a mi deporte”, asegura, anticipando que buscará batir el récord provincial que ella misma ostenta. Y, por supuesto, sueña con volver a representar a Argentina. “Siempre está presente ese deseo, pero por el momento vamos paso a paso. Este es un nuevo inicio para mí”, concluyó Medina, que superó numerosos obstáculos en estos últimos años para volver a lo grande y para encender las ilusiones del atletismo tucumano, que tiene en ella a una gran representante.
¿Qué es la osteocondritis?
Según el portal MayoClinic, la osteocondritis es una “enfermedad articular en la que el hueso que se encuentra debajo del cartílago de una articulación muere debido a la falta de flujo sanguíneo. Este hueso y cartílago pueden desprenderse, lo que causa dolor y posiblemente dificulta el movimiento de la articulación”.